Factores de riesgo de la aniridia

La aniridia adquirida está ligada a factores externos, habitualmente traumatismos oculares severos. Por otro lado, la aniridia congénita está causada por una mutación del gen PAX-6, implicado en la formación del ojo durante el embarazo. Generalmente, esta mutación es hereditaria y se transmite de padres a hijos siguiendo un patrón autosómico dominante, de modo que es suficiente con que solo uno de los dos progenitores sea portador del gen defectuoso para sufrir la enfermedad. Por otro lado, la aniridia también puede aparecer de forma esporádica, es decir, sin que haya antecedentes familiares, algo que ocurre hasta en un tercio de los pacientes.